Venir a Aquarama es un tsunami de emociones.

Planificar el día, llegar por fin al parque, disfrutar de tus atracciones favoritas… Y a eso le sumamos un montón de cosas de las que estar pendientes. Por eso os recordamos sin parar, tanto en redes sociales como en la megafonía del parque, que no perdáis de vista vuestras pertenencias.

Tenéis varias opciones para dejar vuestras cosas a buen recaudo. La primera es nuestro servicio de consigna o lockers, que encontraréis en la entrada del parque y os permitirá disfrutar de las atracciones sin tener que estar pendientes de vuestros objetos de valor. 

Lockers Aquarama

Otro clásico de los veranos en Aquarama son los turnos de guardia en las tumbonas. Cuando venís en grupo, siempre se puede aprovechar un ratito de descanso para quedarse echando un vistazo a las bolsas, las toallas o la nevera. Mejor no dejar vuestras cosas sin vigilancia porque es fácil confundirse. ¡No sabéis la de toallas o mochilas idénticas que podemos encontrar en el parque!

Lo de controlar vuestras pertenencias incluye también estar pendientes de las chanclas. ¿Sabéis cuántas sandalias exactamente iguales puede haber un día en el parque? ¡Miles! Así que lo más seguro es llevarlas con vosotros cuando utilicéis las atracciones o, nuestro tip de #Winnerdelverano total, venir con escarpines, esas zapatillas especiales para agua que también podéis utilizar en las atracciones.

Venir a Aquarama supone también estar pendientes de los más pequeños. Por supuesto, os aconsejamos que no los perdáis de vista ni un segundo, especialmente a los más peques, que se despistan y se asustan con facilidad. Si queréis ponérselo más fácil a ellos y a nuestro equipo de socorristas, os recomendamos que apuntéis el número de teléfono de su acompañante en el interior del bañador o en una pulsera. Para los que ya son un poco más mayores, aprenderse el teléfono de papá o mamá puede ser toda una aventura, aunque mejor llevar el número en algún lugar escrito por si se ponen nerviosos y no lo recuerdan en ese momento.

Chiquilandia

También es recomendable establecer puntos de encuentro cuando ya son un poco mayores. “Si nos perdemos, nos vemos en el Kraken”, por ejemplo. Un punto céntrico y fácilmente reconocible es perfecto para reencontrarnos cuando nos perdemos y siempre nos da seguridad. Recordad que los niños mayores tienen más capacidad para saber dónde está ubicada su familia que los peques. Establecer estos puntos de encuentro desde sus primeras visitas a Aquarama puede facilitar mucho las visitas a medida que se hacen mayores.

¿Y qué hacer cuando un niño se pierde? Obviamente, informar al personal de Aquarama para que os ayudemos a encontrarlos. Es importante recordar que los niños más mayores, especialmente los que conocen el parque como la palma de su mano, posiblemente no estén perdidos, sino disfrutando con sus amigos ajenos a todo. En estos casos, os recomendamos dejar bien claras las normas y los puntos de encuentro antes de la visita al parque.